El correo electrónico sigue siendo uno de los medios de comunicación más efectivos, así como una herramienta que te permite llegar a públicos o audiencias de forma masiva.
Sin embargo, todo depende de una estrategia para que esta herramienta no se convierta en un enemigo tuyo.
Comencemos con tus contactos, muchos de los prospectos que generas no son de alta calidad, por lo tanto es necesario un sistema de clasificación si quieres convertir estos prospectos en clientes. Crea una tabla en Excel donde puedas agrupar a tus prospectos por gustos y preferencias y de esta forma enviar información más personalizada.
Una vez hecho esto sigue estos consejos para diseñar una estrategia de e-mail marketing efectiva:
Identifica tus objetivos
¿Qué quieres comunicar? ¿Qué acción quieres que el cliente tome? Recuerda que lo que buscas es construir una relación.
Comunica beneficios, no características
Una característica dice qué es lo que hace tu servicio, mientras un beneficio dice cómo tu servicio satisface una necesidad o supera un problema. Tus clientes quieren saber, “¿Cómo me beneficia esto?”
Incluye una oferta y Personalízala
Da a tus prospectos una razón para responder ahora. Hazlo relevante, irresistible y que valga la pena su tiempo y esfuerzo. Así mismo, la personalización tiene una tendencia a incrementar la respuesta ya que es más probable que los recipientes lean tu mensaje cuando usas sus nombres y personalizas la oferta para ellos
Hazlo Sencillo
Procura ser muy concreto y haz fácil para tu audiencia encontrar lo que estás ofreciendo o comunicando. Pon atención al lenguaje y a tu ortografía. También es importante que incluyas una «llamada de acción», es decir, invítalos a que visiten tu perfil social, o bien una forma de responderte como un mensaje por WhatsApp.
Usa listas específicas y rastrea su comportamiento
El correo directo dirigido a la audiencia correcta es más relevante para esa audiencia y más probable que genere el tipo de respuesta que quieres. Prueba diferentes formatos, listas, diseños, mensajes, etc. Tu comunicación debe evolucionar a medida que aprendas qué funciona y qué no. Usa un encabezados dirigidos a prospectos específicos, por ejemplo: Cómo calcular lo que puedo pagar de un crédito hipotecario
